Ser poeta no necesariamente significa tener
todas las ideas desordenadas, significa poder expresar unos sentimientos un
mensaje de forma que conmueva al lector. Eso desde luego no se podría lograr
con ideas desordenadas en una mañana de locura. Cierto es que algunos poetas
crean sus obras desde la nada pero eso no quiere decir que todos lo hagan. Y para
expresar sentimientos o hechos importantes creo que necesitas una serie de
ideas bien formuladas y una tesis alrededor de la cual esas ideas tienen que
flotar.
El filósofo es una persona que se hace
preguntas a las que la respuesta no es evidente. Para poder responderla acude a
hechos científicos a experimentos, a defensas y criticas recopiladas de otras
personas o que el mismo aporta. Las preguntas filosóficas se responden
generando otra pregunta que produce otra duda sobre la vida misma. Tanto pensar
en el origen de las cosas y en lo que esta misma nos puede reservar puede
llevar a una persona a la locura, por lo tanto es mas interesante y mas cierto
decir que hacer filosofía puede llevarte a la locura.
Para llegar a desvelar el gran misterio de
la vida pienso que deberíamos todos tener un punto medio entre filósofo y poeta,
es decir un punto que se podría denominar “Poeta Filosofo” porque necesitamos la
manera expresiva de un poeta y la forma crítica y desordenada de un filósofo.
Cada mañana que me levanto tener la inspiración
de un poeta y luego a media tarde que esa inspiración se mezcle con todas las
ramas de la filosofía y que desde mi interior brote un poeta filósofo.